Época: Escultura
Inicio: Año 1300
Fin: Año 1500

Antecedente:
La escultura del Gótico Tardío
Siguientes:
Cataluña
Navarra y el País Vasco
La corona de Castilla
La segunda mitad del siglo XV

(C) Joaquín Yarza Luaces



Comentario

Igual que en el Imperio, en la Península Ibérica estamos en una de las grandes etapas de la escultura, con un enorme número de talleres de gran calidad abiertos, una distribución de los mismos con cronologías muy diferentes, acusando la llegada abundante de obras y, sobre todo, artistas nórdicos, a partir de la segunda mitad del siglo XV, y distinguiéndose los talleres por influencias distintas y hasta particularidades en los materiales elegidos.En la segunda mitad del siglo XIV y primera del siguiente, son más importantes Cataluña, Baleares y Navarra. A partir de entonces, es Castilla la que domina el panorama, sin olvidar el interés de León, Aragón y Andalucía. No siempre se tienen explicaciones para ello, pero muchas son bastante evidentes. Sepulcros monumentales, retablos (de escultura o mixtos con pintura), imágenes exentas, sillerías de coro y aun portadas monumentales, dan idea de que todas las posibilidades se explotaron. A pesar de que la producción fue enorme, no dejaron de importarse numerosas obras. Por un lado, piezas sueltas, imágenes de devoción. Por otro, retablos enteros de Flandes o conjuntos de relieves de alabastro ingleses. Detrás de los encargos, están todas las clases sociales con medios para adquirirlos. Los sepulcros monumentales siguen siendo reflejo del deseo de pervivencia en la memoria de los contemporáneos, se trate de obispos, religiosos en general, reyes o nobles. Los grandes retablos de alabastro catalanes suelen tener detrás a un clérigo, pero en los de madera policromada castellanos hay que incluir desde mercaderes hasta parroquias.